DESAHUCIADOS

Ha llegado el día fatídico, nuestro bar ha cerrado, y digo nuestro porque los que frecuentábamos Charly  así lo considerábamos. Sé que voy a repetir algo dicho en este blog, pero es inevitable.

Los primeros contactos fueron cuando, aún muy jóvenes, nos iniciamos en la aventura del Tierra y Pinar, allí en el salón de Fuencis, nos mezclamos con gente que no conocíamos, pues la diferencia  de edad era de unos cuantos años. En fin, carrocerías Escarda, pero surgió la magia y enseguida nos aceptaron como miembros y colaboradores de la revista. Lo que aprendimos en esos años fue sinceramente algo que es muy difícil de olvidar, en ese citado salón mantuve mis primeras conversaciones con Charly, pues ya era concejal, hablando de lo que nos gustaba en esos momentos nuestra afición por la música. Comentábamos la posibilidad de traer grupos que en esos años hacían sus primeros bolos y eran asequibles en el precio, pero ahora entiendo en primera persona que a veces cuando se trata de dinero público es complicada la labor de un concejal como era Charly.

Y  qué decir de ti, Fuencis, lo que nos hemos reído en aquellas partidas interminables de carta pasada, cómo descubriste nuestros primeros amores en los sofás azules del final del bar, cómo aprendimos a jugar al mus, en esas partidas de los domingos, y luego las cañas. En fin, el Charly era nuestro sitio de quedar, no importaba que llegases pronto, siempre estabas, Fuencis, para charlar un rato con nosotros.

San Agustín 1990

Etapas de nuestra vida que han pasado en Charly y que lamentablemente han llegado a su fin. Ayer la sensación era triste, como si el cierre del bar no se va a producir y que volveremos algún día a preparar la lista de la peña, a tomar una caña después de un pleno, a tomar un café , etc.

La vida continúa, pero no va a ser igual sin nuestro BAR CHARLY.

Jorge.